Khaled Barakat, miembro del Comité Ejecutivo del movimiento Ruta Alternativa Revolucionaria Palestina, renovó la posición de nuestro movimiento durante una serie de seminarios políticos y entrevistas con medios de comunicación palestinos, árabes e internacionales, declarando:
«La Autoridad Palestina y ciertos organismos de seguridad bajo su control son cómplices de los crímenes sionistas-estadounidenses que están siendo perpetrados en los campos y ciudades de la Cisjordania ocupada, así como del asedio y la guerra genocida en la Franja de Gaza.
Los llamados líderes palestinos de Ramala están implicados en crímenes políticos que alcanzan el nivel de traición nacional, conspirando contra la resistencia y apuñalándola por la espalda. Estos crímenes graves y documentados no prescribirán y serán juzgados por el pueblo palestino, tarde o temprano.
El aparato de coordinación de la seguridad de la AP es, en esencia, un batallón de agentes de la ocupación, una herramienta de seguridad y económica al servicio de las decisiones estadounidenses, europeas y de los saudíes, y una parte integral del régimen oficial árabe, dividido entre la impotencia y la complicidad.
Hacemos un llamado a aislar a la AP y boicotearla en todos los niveles. La resistencia armada palestina es la única representante legítima del pueblo palestino; no reconocemos la legitimidad de ningún otro partido en este papel.»