Masar Badil denuncia ante la comunidad internacional el atropello contra Mohammad Al-Khatib, coordinador de Samidoun en Europa: La decisión de Bélgica contra Khatib es un asesinato político
Bruselas – Desde Masar Badil (Ruta Revolucionaria Alternativa Palestina) denunciamos y advertimos sobre las gravísimas consecuencias de la decisión del gobierno belga de revocar el permiso de residencia de nuestro compañero Mohammed Khatib, miembro de nuestro comité ejecutivo y coordinador de la red Samidoun en Europa para la defensa de los prisioneros palestinos.
Declaramos que esta medida constituye un «asesinato político en toda regla», que no solo busca silenciar a un luchador por la libertad de Palestina, sino que además proporciona al enemigo sionista un pretexto para escalar su persecución, tanto política como físicamente, contra la resistencia palestina en el exilio.
Afirmamos con total contundencia que el gobierno belga asume plena responsabilidad por esta decisión criminal y por la amenaza directa que representa para la vida e integridad de nuestro compañero Khatib. Denunciamos que se trata de una violación flagrante de los derechos humanos y las libertades fundamentales, enmarcada en la hipocresía de una Europa que se autoproclama defensora de los derechos mientras persigue a quienes luchan contra la opresión.
Recordamos que esta política represiva no es un hecho aislado: es la continuidad del legado colonial y genocida de Bélgica, cuyos crímenes en el Congo aún claman justicia. Hoy, ese mismo Estado se pone al servicio del sionismo, mientras en Gaza se consuma un genocidio contra nuestro pueblo.
Agradecemos profundamente la masiva ola de solidaridad internacional hacia nuestro compañero, expresada por organizaciones, movimientos y fuerzas antiimperialistas en todo el mundo. Hacemos un llamado urgente a transformar esta solidaridad en una gran campaña militante de masas contra el exterminio en Gaza y por la liberación de Palestina. Convocamos a construir un frente único de resistencia que defienda no solo a nuestro pueblo, sino también a los migrantes, refugiados y trabajadores oprimidos en Europa.
Dejamos claro que este ataque no va solo contra Khatib: es un atentado contra todo el pueblo palestino en el exilio. Exigimos la movilización inmediata para obligar al gobierno belga a dar marcha atrás ahora mismo, sin excusas ni dilaciones.
¡La resistencia sigue!
¡Hasta la liberación de Palestina del rio al mar!